“Baltar debe decir ya si frenará la privatización de la medicina nuclear para pasar la gestión al Doctor Negrín”
El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Iñaki Lavandera, instó hoy al Gobierno de Canarias a que realice cuanto sea necesario para que el servicio de medicina nuclear del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín sea gestionado por el propio centro sanitario, pues se trata del único servicio asistencial de gestión privada dentro de un hospital público en todo el archipiélago.
Según dijo, “es necesario que el consejero diga si tiene la voluntad de parar el proceso de desprivatización ya iniciado, si tiene realmente la intención de trabajar por la sanidad pública, defendiendo los recursos públicos e invirtiendo en el sistema público, algo que no está en contradicción con que el paciente sea el centro del sistema, sino más bien todo lo contrario”.
“Estamos ante un claro ejemplo sobre cómo ha sido concebida la prestación de servicios sanitarios públicos en la Comunidad autónoma a través de operadores privados”, dijo en el pleno del Parlamento, donde recordó que es la empresa Dimec SA, del Grupo San Roque, la encargada del servicio desde el año 2005, siendo consejera entonces María del Mar Julios.
Lavandera señaló que el contrato con Dimec está vencido, es improrrogable y, por tanto, no es posible una alteración en las condiciones de la prestación del servicio, tal y como la empresa alega. “O se presta de forma directa o continua a través de una empresa que, en todo caso, tendrá que ser seleccionada mediante concurso público, y esta es la decisión que debe tomar la Consejería de Sanidad: volver a sacar a concurso la prestación del servicio o asumirlo mediante gestión directa”, expuso.
Para ser más exacto, explicó que el consejero debe decidir si desautoriza al anterior equipo directivo del hospital y a la anterior Dirección del Servicio Canario de la Salud y de la Consejería de Sanidad, cambiando el criterio ya adoptado y razonado, o continúa con un proceso ya iniciado, presupuestado y profesionalmente valorado, que es la gestión directa del servicio de medicina nuclear por parte del centro hospitalario.
El portavoz socialista recordó que existe un escrito firmado por el anterior gerente del centro en noviembre de 2016 por el que se comunicaba a la Consejería de Sanidad el ahorro que suponía para el SCS el cambio de modelo. “Baltar dice que no existe expediente administrativo y que una hoja de Excel no es un informe porque no está firmada, pero los números no engañan y en ese ya famoso escrito se calcula en torno a 800.000 euros el ahorro para el Servicio Canario de la Salud”.
Iñaki Lavandera subrayó que la situación actual es una anomalía “y no verlo así es algo que nos diferencia y que explica por sí solo el nombramiento del actual consejero, quien ha dicho que existe un cierto miedo a perder parte del presupuesto que ahora mismo se destina a las clínicas privadas”. Así, instó a Baltar a hacer la transición de forma “amable y rápida, para beneficio de los pacientes y del sistema”, al tiempo que consideró que no es casual el nombramiento del consejero por Clavijo, como tampoco lo es el de las direcciones de área de Tenerife y Gran Canaria, que gestionan el mayor presupuesto para concertación y que provienen, al igual que el consejero, de empresas del sector, con intereses y contratos con el Gobierno canario.
Entre otros hechos no casuales, el parlamentario del PSOE habló de que durante la presente legislatura previsiblemente comiencen los trabajos para un nuevo expediente de contratación con el Hospital San Roque Maspalomas; que se iniciasen los trabajos para sacar a concurso la hospitalización de corta y media estancia en centros privados; que se sacase a concurso la adquisición de la resonancia magnética nuclear de La Palma, Lanzarote y Fuerteventura; que el anterior consejero comunicase oficialmente la decisión de prestar directamente el servicio de medicina nuclear del Doctor Negrín, o que el presidente de la Comisión de Sanidad de la Confederación Canaria de Empresarios y presidente de los hospitales San Roque afirmase que “las estadísticas avalan que con 16 millones de euros se pueden reducir las listas de espera sanitarias”.
“Todo esto nos hace pensar que la campaña de acoso y derribo a Jesús Morera por parte de Coalición Canaria y, en especial, por Fernando Clavijo, poco tenía que ver con la salud de los canarios y sí con los intereses de determinadas empresas”, continuó Lavandera, quien instó al actual consejero a desarrollar una gestión transparente y a situar al paciente en el centro del sistema.