El PSOE propone incentivar la producción de patentes en Canarias
XH/ El Grupo Parlamentario Socialista ha registrado una proposición no de ley por la que pide al Gobierno de Canarias que cree las bases, dote los fondos necesarios y convoque un premio a la producción de patentes para personas físicas y jurídicas residentes en Canarias, que incentive su producción y que compense económicamente a sus productores, sin que ello signifique ningún derecho sobre la titularidad de la patente generada por el premiado.
El portavoz de Conocimiento del PSOE en la Cámara, Gabriel Corujo, explica que este convocatoria, cuya petición se eleva al Ejecutivo regional a través de la Agencia Canaria de Investigación, Desarrollo y Sociedad de la Innovación (Aciisi), iría acompañada de acciones de promoción de la producción de patentes españolas y europeas, acciones de formación y acciones de divulgación de los resultados obtenidos.
Corujo señala que uno de los indicadores más utilizados para medir la capacidad de un país o una región para explotar el conocimiento y su potencial para convertirlo en ganancia económica es la propiedad industrial. En el año 2014, indica, se produjeron en el conjunto del Estado 3.031 solicitudes de patentes, de las que sólo 23 fueron solicitadas desde Canarias. “Este es un dato absolutamente significativo, pues pone de manifiesto la ausencia de una cultura de la innovación suficientemente extendida en el territorio canario y, por consiguiente las dificultades para alcanzar un modelo que explote el conocimiento”, afirma.
El parlamentario socialista considera urgente revertir esta tendencia, “pues en Canarias existe absolutamente todo lo necesario para alcanzar al menos la media de producción de patentes del resto de comunidades autónomas, escuelas universitarias punteras, la eclosión de un sistema emprendedor tecnológico que comienza a hacerse un hueco en el tejido productivo, calidad y cualificación técnica de los profesionales, etcétera”.
Asegura además que no es cultura innovadora lo que falta en las islas, “caracterizadas históricamente por el surgir de numerosos ingenios, en especial en el ámbito de la agricultura, sino que lo que no existe es 'costumbre inventora', que no se corresponde sólo con idear una invención, sino con crear un registro documental de la misma y protegerla con los mecanismos que la legislación española y europea pone al servicio de los inventores”.
Por tanto, insiste en la necesidad de proteger el conocimiento a través de patentes, modelos de utilidad o diseños industriales para su potencial explotación económica futura. “No se trata en esta proposición no de ley tan sólo de subir las estadísticas de producción de patentes, sino de hacer permeable a la sociedad, personas y empresas a la cultura de la protección del conocimiento”, subraya Gabriel Corujo, y hace hincapié en que es preciso reforzar los apoyos a la innovación incluso desde antes de la propia semilla de la empresa, precisamente para consolidar las empresas nacidas en la cultura de innovación, y el fomento de nuevos emprendedores que lleven la innovación al núcleo de sus negocios.